El primer puesto en mi lista de "cosas/gente que envidio"

En el momento en el que menos te lo esperes sucederá, las cosas cambiaran tan dramáticamente que no te darás ni cuenta, no sabrás en que momento dejaste de soñar para tener otras ocupaciones, y las muñecas desaparecerán dejando de lado tu infancia y dando paso al alcohol y los porros, dando paso al amor y a los problemas que el implica, daremos paso a todo aquello que de pequeños nos prohibían, estaremos un nivel mas cerca de nuestro propio "GAME OVER", daremos paso a la adolescencia. Pero no quiere decir que por ello tendremos que dejar de soñar, simplemente dejaremos de recordar lo que por la noche nos hizo felices pensar que era realidad, dejaremos de creer que el/ella te quería y que todo era perfecto, pero claro, alguien decidió que lo que uno sueña luego no ocurre. Y cuando te das cuenta de que estás en la adolescencia, de que ya no quedan muñecas ni sueños ni amores de verdad, cuando te das cuenta es demasiado tarde para creer que esa dulce voz que te despertaba para ir al colegio se ha ido y a hora es un "despierta joder que llegas tarde" y así será por siempre.Algún día podremos decir que conseguimos volver a la infancia donde vigilábamos a nuestros muñecos por si cobraban vida y las Barbies o los AccionMan eran el único artilugio que necesitábamos para ser felices. Aun recuerdo esa época con nostalgia, y hace apenas tres años que me despedí de ella, sin duda es la despedida mas larga de mi vida, y también la mas dolorosa.
 Pienso más en los momentos buenos que tuve que en los que tendré, recuerdos jugando al escondite o soñando qué seremos de mayores, yo quería ser veterinaria, profesora, policía,bombero, médico y aparte quería ser feliz, millonaria y tener una casa en la playa, soñar es gratis y yo soñaba mucho.
Procurábamos ser buenos hijos, no desobedecer a papá ni a mamá por que no queríamos decepcionarlos o verles enfadados, y fíjate que ahora no dejamos de hacerlo, fumamos, lloramos, dejamos de creer, desobedecemos, nos enfrentamos, respondemos, nos fugamos y pataleamos si no nos salimos con la nuestra. Echo de menos esa época de despreocupaciones en las que solo queríamos jugar y dormir.
 Pero todo aquello quedó atrás y en mi opinión nada vuelve a ser igual, hagamos lo que hagamos hemos crecido y no podemos regresar a la infancia, no podemos llorar esperando que nos cojan en brazos, no podemos bajarnos a jugar al escondite, no podemos recuperar las muñecas, no nos queda nada.
Nos hicimos esclavos de la tecnología, nos han atado a las redes sociales, a las aplicaciones del móvil, nos hemos convertido en adoradores de móviles, televisiones, ordenadores y demás. Y luego nos preguntamos porqué el mundo está como está, ¿cómo quieres que esté bien si ni miramos los libros y nos preocupamos más por lo que nos dice fulanito o fulanita sobre mengana? Con el avance hemos creado ignorantes,gente sin cerebro que se preocupa más por la princesa del pueblo y por su ignorancia que por su vida y su ignorancia.
Tampoco me quejo de los avances, me alegra que hayamos avanzado eso es una buena señal, solo que a la vez que avanzamos estamos atrasando las mentes que se encargarán del mundo (si no lo destruimos antes).
La conclusión de esto es que, ni podemos volver al pasado a jugar, ni podemos curar la ignorancia de una generación.